La Pachamama

La Pachamama
Mi abuelo me contaba siempre esta historia: Un par de hombres estaba cazando peludos cerca del Bermejo. Había luna llena y peludos por todos lados. Se cansaron de cazar. Ya no les cabían más en las bolsas que habían llevado.
- Vamos compadre, ya cazamos muchos, suficiente por hoy.
- ¡No! ¡Hay que aprovechar! No todas las noches vamos a tener esta suerte.
-Volvamos. ¿Para qué queremos más?
Uno quería volverse; el otro, porfiado, quedarse.
Estaban en eso cuando se les aparece un peludo. Ahí, cerquita, a menos de cinco metros y se les para en dos patas con las dos manitos adelante y los miraba. El que se quería quedar agarró la escopeta, le apuntó y gatilló. El disparo no salió y el peludo se fue. El cazador seguro que habrá puteado (eso lo agrego yo).La escopeta le había funcionado perfecta toda la noche. Ahí nomás cambió el cartucho.
Hicieron unos metros más y el mismo peludo se les aparece de nuevo. Y se les vuelve a parar otra vez en dos patas, con las dos manitos delante, mirándolos. Con una mirada mansita, pero desafiante a la vez. El cazador volvió a apuntarle y el tiro de nuevo no salió. El peludo se quedó parado en dos patas un ratito y desapareció detrás de unos yuyos.
-Vamos que es la Pacha, compadre- le dijo el otro cazador.
Hicieron algunos metros más y el mismo peludo, por tercera vez se les volvió a aparecer. Se les volvió a parar en dos patas, con las dos manitos adelante y los volvió a mirar.
-¡Dejalo! ¡Es la Pacha!
-Dame, prestame tu escopeta que la mía no anda.
El cazador porfiado agarró la otra escopeta, la del compadre. La cargó, le apuntó al peludo y se le reventó el tiro en la cara. El caño quedó como una flor. El peludo se quedó un ratito más, mirándolos. Se dio vuelta y se fue tranquilo, caminando.
No me acuerdo bien que le pasó al hombre al final. Si se pegó un susto nomás, si se quedó ciego o si se murió a causa del tiro que reventó a la escopeta.
La primera vez que mi abuelo me lo contó yo no sabía qué animal era un peludo. Después me enteré que era un quirquincho. Tampoco sabía lo que era la “Pacha”. Me imaginaba que era un ser que se podía transformar en diferentes animales para pegarles sustos a los cazadores. Inclusive pensé que era un ente malo o algo así. Después me fui enterando un poco más que significa eso de la Pachamama.
Tampoco conocía el Bermejo. Hasta que lo conocí. Y entonces esa historia tomó otro carácter. Como otro color. El río Bermejo, (no sé si todo es así), pero una vez fuimos a pescar con mi familia en un colectivo prestado y amigos y amigos de amigos. Yo era chico. Tendría diez años. Con mi hermana siempre hablamos de ese lugar.
Es uno de los lugares más lindo que conocí. El amanecer del Bermejo es increíble. El cielo se pone todo naranja, de un naranja intenso, puro. Nunca ví un sol tan grande. Pero no sólo es de una belleza visual. El clima, el aire… El calor que hace es ideal. Todo el día en cuero estaba. Dormíamos al aire libre. Había pájaros de todos los colores que cantaban todo el día y de noche se callaban y entonces aparecía un silencio natural y un cielo con unas estrellas de verdad. El piso es todo liso, con una arenilla que apenas lo tapa. Como esos patios santiagueños recién barridos. Todo el día andaba descalzo. Y montes y montes y montes. Pero no tupidos. Lleno de senderos que iban hacia no sé donde.
No tengo claro sobre esa perfección del equilibrio de la naturaleza y todo lo que eso significa e influye. Muchas de esas cosas me están interesando ahora y las voy aprendiendo leyendo, viajando y sobre todo viviendo. Pero al recordar aquella historia y sobre todo aquel lugar, es como que voy entendiendo un poco más que significa y sobre todo que importante que es la Pachamama.

MJS

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